Este seminario propone un debate a partir de una serie de propuestas artísticas que han tratado de dar respuesta a la crisis de la democracia representativa y al “estado de excepción” que, como consecuencia de sucesivas crisis de carácter global y local, amenaza el sostenimiento de los derechos fundamentales que habían sido conquistados y consensuados a lo largo del siglo XX. El concepto de “dispositivo” ha resultado muy productivo para la reconsideración crítica de la naturaleza escénica, a menudo desapercibida, que sostiene los mecanismos de individuación, de poder y de aislamiento social: se trataba de concebir el espacio autónomo de la escena como un modelo de empoderamiento ciudadano; para que los espectadores asumieran su agencia, directores, coreógrafos, actores y bailarines debían dejarles espacio. Repensar el público escénico es también un modo de repensar lo público.

Los dispositivos escénicos experimentan otros modos de ser y estar en público. El objetivo no es simplemente convertir a los espectadores en actores, un principio por sí mismo neutro desde el punto de vista político, pues puede conducir tanto a la revolución como al parque temático; el objetivo es más bien experimentar otros modos de hacer juntos, recuperar el teatro (expandido) como un espacio posible de la esfera pública (una potencia y forma efectiva en la producción de lo común), probar modelos de sociabilidad, visibilizar debates y antagonismos incómodos, focalizar teatralidades pre-existentes y socialmente invisibilizadas.

En la lectura deleuziana de Foucault, un dispositivo es descrito como “un conjunto multilineal”, que articula saber, poder y subjetividad y cuya función es “hacer ver” y “hacer hablar”. Y en su propia lectura, Giorgio Agamben define el dispositivo como “todo aquello que tiene, de una manera u otra, la capacidad de capturar, orientar, determinar, interceptar, modelar, controlar y asegurar los gestos, las conductas, las opiniones y los discursos de los seres vivos”. El trabajo con el concepto de “dispositivo” ofrece a los artistas recursos para generar mecanismos de enunciación colectiva. La autoría se retrae, y los asistentes encuentran la posibilidad de singularizarse en una multiplicidad de voces o cuerpos actuantes. Las dicotomías sobre las que se articularon las formas clásicas de poder (sujeto-objeto, individuo-colectivo, actor-espectador, acción-representación) tienen que ser reconsideradas desde la dimensión escénica y performativa de los mecanismos que las producen.

Claro está que estos dispositivos no replican los dispositivos hegemónicos. El reto consiste en idear contra-dispositivos, o en términos de Agamben, “profanar” los dispositivos. Ese es el reto que de distintos modos han asumido los artistas que participan en este seminario, y que lo hacen también como integrantes de colectivos, redes o movimientos que exceden las identidades individuales. Aunque no podemos dejar de observar que la generación de dispositivos de participación fraudulenta (junto a la inflación de prácticas relacionales) ha hecho saltar las alarmas y que algunos artistas y teóricos hayan llamado la atención sobre superficiales ataques a la autonomía artística y sospechosos cuestionamientos de la potencia transformadora de lo poético.

Este seminario cierra temporalmente el Programa de Prácticas Críticas 2016 Teatralidades Expandidas, que se ha desarrollado en el Museo Centro de Arte Nacional Reina Sofía entre octubre de 2015 y mayo de 2016. Entendemos que las propuestas artísticas tienen el mismo valor discursivo que las conferencias y los textos, por ello en este seminario alternaremos conferencias, presentación de piezas, debates y exposición de proyectos. El crítico e historiador de arte Sven Lütticken realizará una aproximación de la sociedad del espectáculo en el marco de un contexto de cambios sociopolíticos marcados por la ocupación del espacio público. La pieza Númax-Fagor-Plus, de Roger Bernat y Elèctrica Produccions, ofrecerá una práctica concreta de participación en un dispositivo asambleario creado a partir de la película de Jordá, con el objetivo explícito de producir una “colectivización del discurso”, sobre la que se debatirá al día siguiente tras la entrevista entre Roger Bernat y Óscar Cornago. Héctor Bourges expondrá los modos de hacer del colectivo Teatro-Ojo, cuyas propuestas resultan difícilmente encuadrables en el ámbito escénico, pero que indagan teatralidades sociales y políticas, en los últimos años marcados por la violencia con la que se ha manifestado el “estado de excepción” en México. Eleonora Fabião recurrirá al dispositivo de presentación de un libro, Ações / Acciones (2015) para debatir sobre las intervenciones poéticas realizadas por ella misma en Rio de Janeiro y otras ciudades, con el telón de fondo del “estado de excepción” institucional que en este momento afecta a Brasil y sus ciudadanos. Finalmente, el seminario será el contexto de presentación pública y debate de los proyectos realizados por los participantes en el Programa de Prácticas Críticas Teatralidades Expandidas 2016, en colaboración con el MEPCV.

Confiamos en que estas jornadas permitan reflexionar sobre los modos en que las prácticas artísticas pueden contribuir a la construcción de otros modos y formas de estar y hacer en público y dar respuestas parciales a las perplejidades generadas por las crisis sociales y políticas de los últimos años. Asimismo, confiamos en que el encuentro genere nuevas complicidades que active nuevos procesos de investigación, creación y acción en el contexto de la ciudad y en colaboración con diversos agentes artísticos y sociales.