Murmurante Teatro es un grupo fundado en 2008 por Ariadna Medina, y Juan de Dios Rath. Es un proyecto de creación e investigación escénica afincado en Mérida Yucatán, interesado en el quehacer teatral contemporáneo y en el intercambio con otras disciplinas, tanto artísticas como científicas. Tiene el propósito de hacer del arte escénico un vehículo idóneo para producir y difundir conocimiento, diálogo y reflexión sobre problemáticas sociales que impactan cotidianamente la realidad de nuestra región. Nuestro proyecto se interesa en la formación de nuevos públicos para el teatro contemporáneo a través de la creación de dispositivos escénicos que propician la cercanía entre artistas y espectadores. Esto permite generar diálogo y reflexión en el contexto de la convivencia escénica, estrechando lazos comunitarios y estimulando la participación social.

El trabajo escénico de Murmurante se ha nutrido de las experiencias de creadores de larga trayectoria que han aceptado realizar residencias y colaboraciones. Es el caso de Jorge Vargas, quien condujo los procesos de laboratorio y puesta en escena de “El viaje inmóvil, estudio en espiral sobre el suicidio” y “Sidra Pino, vestigios de una serie”. Además han colaborado con el grupo los investigadores sociales: Paulino Dzib, Yeni Cruz, Gaspar Baquedano, Irma Can, Carmen Castillo, Celmy Noh, Silvia Peláez, Isaías Valencia y Raúl Lugo. Los escenógrafos Jesús Hernández y Óscar Urrutia, el curador de arte Eduardo Bernal, el dramaturgo Noé Morales, Los artistas multidsciplinares: Josué Abraham, Hernán Medina, Isaac Zambra, Guillermo Quintana, Ricardo Espadas, Erick Silva, María José Pool, Mario Galván, Alejandro Flores, Manuel Estrella, Amín Sodá, Ulises Vargas, Alee Guzmán, Amaury Alonzo, Víctor Rejón, Neto Arteaga, Sebastián Liera, Jairo román, Andy Manrique, Maricarmen Sordo y Daniel Peraza. Los usuarios del Programa Integral de Atención al Suicidio: Sanjuana Sifuentes, Raquel Morales, Efraín Cituk, Sandra Góngora, Alejandro Cesman, Paco Tejeida, Enith Mondragón, Georgina Muñoz, Indira Denisse, entre muchas otras personas.

La concepción de teatro que plantean tiende a expandirse hacia otros territorios como el de la intervención social, las acciones en la comunidad, la recolección de objetos, documentos y archivos. Generar materiales audiovisuales para llevar un registro de los procesos de trabajo se ha convertido en una línea estética del grupo. Este registro audiovisual en algunos casos aparece en las piezas escénicas o deriva en la producción de películas documentales. A fin de cuentas, el proceso les lleva a la conformación de una especie de mapa de experiencias relacionadas con la temática de la pieza que estén trabajando en ese momento y que generalmente están asociadas a una problemática social compleja y a comunidades socialmente activas. De estas experiencias surgieron las películas documentales “El viaje inmóvil, estudio en espiral sobre el suicidio” y “Murmurante, en el umbral de lo escénico”.

Su sede en Mérida cuenta con un foro de pequeño formato, lo cual hace posible un diálogo cercano con los espectadores. Temáticas sociales como el suicidio, la violencia o el paro laboral han dado pie a muchas conversaciones con espectadores que quieren saber más sobre las problemáticas tratadas en las piezas. En Campeche, por ejemplo, funcionarios de la Secretaría de salud presenciaron “El viaje inmóvil, estudio en espiral sobre el suicidio” en la Muestra Nacional de Teatro y posteriormente cofinanciaron una gira regional apoyada por el Programa de Fomento a Proyectos y Coinversiones Culturales del FONCA. A partir de aquella experiencia, decidieron abrir un Programa Integral de Atención al Suicidio local, asesorado por el Dr. Gaspar Baquedano, coordinador del Programa Integral de Atención al Suicidio de Yucatán.

La producción de piezas transdisciplinares como “Manual de cacería” les ha permitido establecer vínculos con especialistas en criminología y psicología forense como el Mtro. Paulino Dzib y su equipo de colaboradores del Instituto Interdisciplinar de Psicología Jurídica, con quienes exploraron a fondo la construcción social de la violencia y algunas de sus expresiones relacionadas con la conducta criminal. A través de la investigación transdisciplinar descubren que la violencia es un fenómeno que concierne a todos y que cualquier persona es susceptible de “cruzar el umbral” en un momento dado. Con “Sidra Pino, vestigios de una serie” abordaron el espacio público, las calles del barrio de Santiago, las rutas de los trabajadores en huelga, la sede de su sindicato, donde produjeron varios acontecimientos que ayudaron a visibilizar un movimiento obrero desgastado, atropellado por la impunidad en el peor momento de las luchas obreras frente al avasallamiento del sistema neoliberal. Las tensiones entre lo justo vs lo legal, lo local vs lo global, la lógica del mercado vs la lógica de la memoria; les permitió acompañar la agonía de una industria que en su tiempo representó el bienestar de sus trabajadores y la identidad gastronómica de una región. Traducir estos conceptos a formas escénicas capaces de cuestionar la posición de los espectadores en torno a estas problemáticas ha sido un desafío constante que ha afianzado la relación del grupo con un público que permanece atento a lo que hacemos tanto aquí en Mérida como en la CDMX.

Su última pieza, “Las Constelaciones del Deseo” les ha permitido relacionarse directamente con comunidades de la diversidad sexogenérica en Yucatán, con asociaciones civiles y colectivos que luchan por la defensa de sus derechos humanos. De manera que ciertas formas de activismo derivadas de su relación con movimientos sociales y procesos de afirmación de la ciudadanía forman parte de sus prácticas escénico-sociales cotidianas.

Web

www.murmurante.org